LA GRATITUD

GRATITUD

Practica la gratitud cada día por las bendiciones recibidas por Dios. Siéntete agradecida por la divina sabiduría y su guía. Por el coraje que te permite afrontar el dolor y por tu fuerza de espíritu.

Da las gracias por el amor que sientes en tu corazón y por tu voluntad de recorrer el camino de la sanación.

Muestra tu gratitud a  aquellos de quienes recibes consejos, aquellos que te inspiran a profundizar en tu fe en Dios y fortalecer tu  confianza en ti mismo.

Desde lo mas profundo de tu corazón  agradécele a Dios, si aun sientes que tu vida esta  sometida a duras pruebas y acabas de salir de otra larga y solitaria noche, siéntete agradecido.

Y si llega el momento en el que sientes que no tienes a nadie a quien  acudir, entiende que nunca  estas del todo solo y da gracias a Dios cada día para sacarte las cenizas.

Practica la gratitud donde quieras que encuentres belleza, en los  actos de bondad de los demás, en el reflejo de la luz del sol sobre el agua, en la mirada amorosa de un animal.

Una vida que se vive con gratitud esta precedida por la  calma, por la alegría serena.

Los sentimientos de gratitud son el preciado botín de una vida así.

Y yo agregaría sonríe, una sonrisa alivia el alma de la pena.