Predicciones del Angeólogo realizadas el pasado 13 de junio Pelotas, banderas y fiesta

Esta semana nuestro querido angeòlogo Juan Carlos Ávila Méndoza nos trae sus impactantes predicciones en el Diario La Voz Predicciones del Angeólogo realizadas el pasado 13 de junio Pelotas, banderas y fiesta Situaciones para distraer cifras significativas y alarmantes se crearán a través del bendecido mundial, grandes sucesos acaparan la atención en los cuatro puntos cardinales de la Venezuela de luz, se va de las manos casos de presos políticos que causará un temblor a nivel de tribunales. Todas las bases de estos dos gobiernos, se resquebrajarán por ataques sin máscaras entre ellos, oposición que no aprovecha tiempos invaluables quedará demostrada y sin caretas en los próximos dieciocho días. El exterior vuelve a ser protagonista, muchas noticias vendrán y ocuparán los grandes titulares pero de medios que no son venezolanos, saldrán del aire de medios impresos todo aquel que no esté desacuerdo con las decisiones no calculadas, poco satisfactorias y además, establecidas desde la isla oscura, voces rojas también gritarán el desacuerdo pleno con estas decisiones. Para el que se fue, el que habla mucho, el chistoso, el cuerdo, el que creció, se abrirán caminos que hasta ahora no los conocía, causó prurito, irritación y gran consternación la salida de este programa del aire que nunca se calcularon las consecuencias que traerá. Mujer del exterior con gran revelación y noticia que posee pruebas irrefutables y sin desperdicios, lo que se trató de ocultar en los últimos tres años, se hablará claro y diáfano. Deserción, salto de talanquera y situaciones bien difíciles atravesará el partido de gobierno. Ahora en contra de un alcalde rojo rojito, se irá toda la población y establecerán el grado máximo de corrupción para tratar de lavar caras que quedarán siempre manchadas. Los estudiantes revolverán el agua como siempre, dando la cara ante la peste de la indolencia y de la indiferencia, protegidos por San Miguel como Arcángel y bendecidos, ya no habrá mas presos pero si más bravíos, el común tendrá que amarrarse pantalones porque la situación es más densa y profunda que antes, ya no hay vuelta atrás ni tampoco hacia adelante, tristeza profunda que causará hecho no esperado pero si auspiciado. Dios con nosotros.